En 2016 tuve el enorme honor de formar parte de la Junta Directiva fundadora de Asociación EMDR El Salvador, con el cargo de tesorera, para luego en Mayo de 2019 asumir el reto de dirigir esta prestigiosa organización. Con humildad asumí las responsabilidades del cargo, lejos estaba yo de poder advertir la avalancha de sucesos que sacudirían los cimientos tanto de la organización mayor EMDR Ibero América a la cual pertenecía nuestra asociación, además de los cambios en la forma de vida conocida por la humanidad.
Inicialmente tuvimos el honor de contar con la visita de grandes maestros expositores de la Terapia EMDR a nivel internacional, desde Uruguay la Dra. Myriam Calero Ginares, de Uruguay presidenta entonces de EMDR-IBA, y en especial nuestro referente Dr. John Hartung, Psy.D. Presidente de EMDR Estados Unidos y precursor de EMDR a nivel mundial.
Entramos al segundo año con una pandemia COVID - 2019, que agudizó en la población los problemas de salud mental, debido a la disminución en la actividad Económica y laboral como consecuencia del encierro obligatorio, lo cual tuvo repercusiones en las actividades de la asociación y es así como tuvimos que aprender a continuar sirviendo a la población en la modalidad virtual.
A nivel Internacional se canceló el V Congreso Iberoamericano de EMDR en Santiago de Chile. Además, EMDR-IBA se disolvió por no poder solventar las discrepancias entre los intereses geopolíticos de algunos representantes de países miembros. En la actualidad nos encontramos ejerciendo una gestión necesaria para buscar representación en la Junta Directiva EMDR América Latina con el objeto de unir fuerzas con más de una docena de países latinoamericanos, y Alianza Global EMDR Infanto-Juvenil, con representación de EMDR America Latina y EMDRIA, que nos lleve a fortalecer la estructura legal y de fortalecimiento en el ejercicio de este modelo psicoterapéutico, fieles al espíritu con que fue creado y que tanto bien hace a la humanidad.